Una recién casada de Tarragona, en viaje de luna de miel, ha sido interrogada durante cuatro horas en el aeropuerto de Nueva York y finalmente devuelta a España por considerarla sospechosa de terrorismo.
Para los que piensan que los sospechosos algo habrán hecho, aquí tenemos un ejemplo del famoso dicho: “las apariencias casi siempre engañan”.
Los errores de la famosa lista que han hecho los americanos de sospechosos de terrorismo son frecuentes.
Recientemente, el Presidente del Real Madrid, Ramón Calderón también tuvo problemas.
http://www.abc.es/20070926/deportes-futbol/confunden-ramon-calderon-narco_200709260255.html
Anteriormente, los habían tenido Antonio Canales y hasta nuestros Príncipes, Felipe y Leticia.
Son tan prepotentes que ni se disculpan de los errores.
¿No tendrían que comunicar al interesado que ha sido incluido para que pueda defenderse? ¿Dónde está el derecho a ser borrado si se trata de un error?
El enlace a la noticia en La Vanguardia: http://www.lavanguardia.es/premium/epaper/20071012/53401531770.html
OBSERVATORIO DEL DERECHO A LA INTIMIDAD Y AL LIBRE ALBEDRÍO
domingo, 14 de octubre de 2007
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