UNO MENOS

¡Y van dos en en unas pocas semanas!
Ningún gurú lo había previsto. La Historia no se ha acabado. El Futuro se presenta abierto. La Humanidad avanza (a trompicones) hacia la Democracia. La Revolución sigue siendo posible (y necesaria).

Revoluciones pacíficas ¿un oximoron? Parece que no. Es significativo que la violencia que ha habido en estas revoluciones ha sido tan asimétrica como la ley de la Gravedad. ¡Para que luego digan de los revolucionarios! (O de los antisistema barceloneses).

Las revoluciones, como las relaciones de pareja, generan la incertidumbre del día después que suele ser clave para su futuro. Surgen muchas dudas para encaminarlas y conjugar los múltiples intereses en juego. Los intentos para que todo cambie para seguir igual, serán muy poderosos.

¿Y en casa de la Vieja Europa? Parece que sus habitantes son tan educados que no pueden hacer más ruido del que permiten las Ordenanzas municipales (excepto en el campo de Fútbol, claro).
Aunque la casa está bastante vieja y las reformas no gustan, parece que todavía las comodidades evitan saltar al ruedo y mancharse esa ropa tan chula, comprada a precio de saldo, en una de las centenares de tiendas que ofrecen por doquier esas cadenas multinacionales que utilizan la mano de obra más barata posible (¡Y hay muchas posibilidades donde escoger desde que el el Mercado es planetario!).
Pequeña sugerencia para vecinos de esta vieja casa: así como sufrimos microfascimos incrustados en Estados aparentemente democráticos, hagámosles sufrir microrevoluciones. Estas tienen la ventaja, por sus limitados objetivos, de no producir agujetas ni sudores desagradables (tampoco hay que pasarse) y además nos permiten seguir con nuestras aficiones preferidas (TV, deportes, shopping, lectura, …). No hay que desdeñarlas por pequeñas. Pueden ser pequeños pasos para recordar a los amos que no han hecho suficientemente bien su trabajo por mucho que tengan en nómina a los listos de la clase y a los voceros de la Prensa.
¿Cuándo salimos de Marcha con la mochila bien provista para hacer Botellónbancario durante varios días? Pasarlo bien no está reñido con conseguir que nuestras arruinadas Cajas acaben siendo Banca pública que funcione con criterios éticos (¡y sin políticos porfa! Son unos plastas que lo acaban arruinando todo)
¿La próxima? Podria ser para cargarse la Ley Sinde y asegurar un Internet libre y neutral (y ya puestos, y por el mismo precio, que sea rápido y baratito)

Tunecinos y egipcios: abrazos para casi todos y besos para casi todas.